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telomit® Bicarbonato de Sodio - Cápsulas
según el Dr. Probst
Sal de sodio de alta calidad y ligeramente alcalina en cápsulas de sabor neutro, sin PEG ni carragenina
Este producto fue desarrollado en colaboración con uno de los tres cofundadores del movimiento crudívoro alemán,
Dr. Dr. Karl J. Probst, para enriquecer tu alimentación.
Bicarbonato de Sodio - Cápsulas
- Bicarbonato de sodio (también conocido como carbonato ácido de sodio o bicarbonato sódico)
- Fórmula química: NaHCO3
- Polvo blanco puro encapsulado
- 1000 mg de bicarbonato de sodio por cápsula
- 100 % vegano
- Pureza muy alta del 99,3 %
- Sin excipientes ni aditivos
- Cápsulas veganas prácticas, sin PEG ni carragenina
- Sabor agradablemente neutro
- Fácil de dosificar y de tragar
- Envasado en Alemania
- Contenido: 200 cápsulas
- Almacenar en lugar seco y protegido de la luz
- Un envase dura entre 100 y 200 días
- NOTA: Tomar siempre con abundante agua (no tomar con agua mineral con gas, zumos de frutas u otras bebidas)
INGREDIENTES
Bicarbonato de sodio, envoltura de la cápsula: hidroxipropilmetilcelulosa (HPMC)
RECOMENDACIÓN DE CONSUMO
Tomar de 1 a 2 cápsulas al día con 1–2 vasos de agua (sin gas). El bicarbonato de sodio se toma mejor con el estómago vacío o 2 horas después de una comida para evitar molestias digestivas. No exceda la cantidad diaria recomendada. Los complementos alimenticios no deben utilizarse como sustituto de una dieta equilibrada, variada y un estilo de vida saludable.
El bicarbonato de sodio (NaHCO₃), también conocido como hidrogenocarbonato de sodio o simplemente “bicarbonato”, se encuentra naturalmente en minerales como la nacolita y la trona (de ahí el término “natrón”) y forma parte de aguas y rocas. Es una sal inorgánica blanca compuesta por sodio (Na⁺), bicarbonato (HCO₃⁻) e iones de hidrógeno. Es una sal de sodio alcalina de origen natural. Debido a su sabor relativamente salado, el polvo de bicarbonato de sodio es ideal para encapsular, lo que facilita su ingesta y dosificación.
El bicarbonato de sodio tiene una larga historia y ya se utilizaba en la antigüedad. Ya alrededor del 2600 a.C., los antiguos egipcios usaban natrón natural extraído de lagos salados secos. Griegos y romanos lo empleaban con fines higiénicos y medicinales. En 1846, los estadounidenses Austin Church y John Dwight inventaron un método para fabricar bicarbonato (baking soda), que se difundió rápidamente en EE.UU. A comienzos del siglo XX, el bicarbonato de sodio se convirtió en un remedio doméstico común. Hoy en día es uno de los productos químicos más importantes y versátiles del mundo.
Las materias primas de nuestros productos se seleccionan siempre en consulta con el Dr. Probst, director científico de Telomit. Por eso, las cápsulas de bicarbonato de sodio telomit® tienen una pureza excepcional y, por tanto, una calidad superior — un estándar que mantenemos en todos nuestros productos. Utilizamos únicamente cápsulas veganas, de origen puramente vegetal, sin PEG ni carragenina — algo que consideramos fundamental.
